Fotografía de recién nacidos: 9 consejos para hacer unas primeras fotos impresionantes
Hacer la primera sesión de fotos de un recién nacido puede ser toda una tarea.
Pero la verdad es que no tiene por qué ser tan intimidante, incluso si acabas de empezar.
En esta guía te prepararemos para tu primera sesión de fotos de bebé, desglosando todos los aspectos básicos y dándote 9 consejos prácticos para llevarla a cabo.
Pero antes de empezar, te recomendamos que eches un vistazo a nuestra guía de fotografía de retrato para obtener más información.
¿Qué es la fotografía de recién nacidos?
Muchos padres primerizos desean documentar los primeros días de vida de sus hijos. De hecho, son los recuerdos más entrañables.
Esto es exactamente lo que hacen los fotógrafos de recién nacidos: documentar los primeros momentos de una nueva vida. La fotografía infantil consiste en capturar las primeras etapas de la vida de un bebé, con sus padres y de una forma estéticamente agradable.
¿Cuándo hacer fotos a los recién nacidos?

Nunca es tarde para hacerse el primer retrato. Sin embargo, algunos periodos son más adecuados que otros.
Y aunque existe la fotografía de parto, que retrata los primeros respiros absolutos de un bebé, la fotografía de recién nacidos tiene lugar un poco más tarde y en un entorno completamente distinto.
El periodo más habitual es justo después de la primera semana.
7-14 días después del nacimiento
La segunda semana después del parto es la mejor para la primera sesión de fotos. Entre los 7 y los 14 días, el bebé sigue durmiendo la mayor parte del tiempo. Por eso es mucho más fácil captar los dulces momentos de sueño.
Además, suele ser el momento en que los niños tienen la piel suave como la seda, sin acné infantil ni astillas, así que es un momento estupendo.
También son muy ligeros y fáciles de posar mientras duermen. Sin embargo, también son bastante frágiles.
Equipo fotográfico esencial para la fotografía de recién nacidos
En el mundo de las infinitas opciones de equipamiento, mucho depende de la situación y de sus preferencias personales.
Pero aquí tienes 3 elementos esenciales para tu primera sesión de fotografía infantil.
1. Una cámara DSLR

En general, no te equivocarás con una buena cámara réflex digital: es rápida, flexible en los ajustes y te ofrece un resultado de alta calidad.
Opta por algo con ISO alto y poco ruido, ya que la luz natural en interiores podría ser limitada.
¿No tienes una? Echa un vistazo a nuestra Lista de las mejores cámaras para elegir en 2023.
2. Un objetivo primario

El mejor consejo para fotografiar retratos es utilizar un objetivo de focal fija. Aunque tengas la tentación de llevarte un objetivo zoom por su versatilidad, un objetivo de focal fija es mejor por varias razones.
Entre ellas se incluyen un mejor uso de la luz disponible, que proporciona un retrato más nítido y detallado, y un mayor margen de maniobra en la composición.
Ah, y un bokeh delicioso, ¡por supuesto! Para que todo el protagonismo recaiga en el bebé del encuadre.
3. Reflectores
Como la luz interior suele ser limitada, necesitas controlarla al máximo. Los reflectores resultan muy útiles para redirigir la luz de las ventanas hacia el bebé.
También ayudan a que el retrato sea mucho más suave al reducir las sombras sobre el sujeto.
Si el equipo fotográfico y la jerga técnica te echan un poco para atrás, consulta nuestra sección Fotografía 101 para poner los pies en el suelo.
9 consejos para fotografiar a un recién nacido

1. Piensa siempre primero en la seguridad
Una obviedad para los padres experimentados, pero cuando eres un fotógrafo que acaba de empezar en este tipo de sesiones fotográficas, es crucial tener en cuenta la seguridad a toda costa.
En realidad, los bebés tan pequeños no pueden sostener la cabeza - ¡mito desmentido! Así que todas esas bonitas fotos de recién nacidos apoyando la cabeza en el aire o en los brazos no son más que hábiles montajes.
Conclusión: Sea cual sea la pose, el lugar o el atrezzo que utilices, ante todo debes velar por la seguridad de tus preciados sujetos.
2. Crear un entorno favorable al bebé

La preparación es la clave. Asegúrate de planificar todas las localizaciones y su logística, todos los cambios de ropa y las posibles poses. Cuanto más tranquilo sea el proceso, menos estrés sufrirá el bebé.
A veces, crear un entorno favorable al bebé significa utilizar un calefactor cuando se fotografía al recién nacido desnudo, poner canciones de cuna, tener chupetes cerca o incluso hacer descansos.
Cueste lo que cueste, el objetivo es una foto en la que aparezca un niño encantado.
3. Lleva accesorios para conseguir texturas únicas

En la fotografía infantil, los niños son, obviamente, el centro de atención. Sin embargo, pequeñas mejoras con accesorios como ropa de colores y sombreritos, zapatos y diademas únicas pueden hacer que la foto destaque.
Lo mismo puede decirse de distintos accesorios, como juguetes, luces de bebé, cojines únicos y mantas. Todos los elementos adicionales del marco pueden añadir profundidad y crear un agradable efecto visual.
4. Prueba un saco de judías para posar

Posar a un ser tan frágil puede ser un verdadero reto, ya que la mayoría de las poses habituales de los recién nacidos simplemente no pueden realizarse.
Una de las técnicas de posado más creativas y estéticas podría ser utilizar un bean bag, que es una almohada grande que se forma alrededor del bebé.
Una bolsa de frijoles siempre es una ventaja, ya que su uso es muy versátil. Facilita mucho tumbar a los pequeños modelos boca arriba o boca abajo.
5. Experimentar con diversas composiciones
Ya sabes lo que hay que hacer: la seguridad y la comodidad del bebé son lo primero. Así que te quedas con un modelo de retrato más estático de lo habitual.
Esto significa que debes ser creativo con la composición. Prueba a jugar con los ángulos y a hacer zoom en algunas partes del cuerpo: ¡seguro que a los padres les gusta verlo todo!
Intenta siempre sacar el máximo partido de cada pose, ubicación o accesorio.
6. Utiliza la luz natural siempre que sea posible y apaga el flash de la cámara

La luz de las ventanas ya ha aparecido varias veces, y es que los niños pequeños son sensibles a todo lo artificial.
Los adultos suelen asustarse con las luces del estudio y los flashes agresivos de las cámaras. Así que las luces parpadeantes son un no-go cerca de los niños de una semana.
En un mundo ideal, todas las casas de padres a las que llegas están situadas en la soleada California y tienen paredes de cristal para dejar pasar toda esa luz.
Pero a menudo las ventanas no son suficientes y las luces interiores distan mucho de ser fotogénicas. En este caso, confía en los ajustes de tu cámara y prueba a utilizar softboxes más pequeños.
7. Implicar a los padres en el proceso y en la foto

¿Por qué no tener al recién nacido en su hábitat natural: los brazos de los padres? Tener un recuerdo tan íntimo será muy especial.
Esto da una gran variedad de poses con las que ser creativo, ya sea sujetando al niño cerca del pecho, sólo con las palmas de las manos o estando sentado. A menudo, las fotos con los dos padres también funcionan muy bien. Entabla un diálogo con mamá y papá sobre las poses, ¡puede que ellos sepan más que tú!
También puede ser una gran idea en una etapa en la que, de otro modo, necesitarías un descanso para calmarte.
Asegúrate de ser delicado con las mamás. Todavía están en fase de recuperación activa y puede que tengan algunas preferencias específicas para sus retratos.
Hablando de familias, si te interesa la fotografía de bodas, también tenemos una guía para ti.
8. Practicar diversas técnicas de envoltura

Junto con un saco de judías, otro artículo común que se suele encontrar en los hogares con niños son los paños para envolver. Pueden hacer maravillas en tu composición.
Una forma es probar varias técnicas de envoltura para conseguir un efecto capullo estéticamente agradable. Practicar con almohadas pequeñas debería funcionar.
Otra forma es experimentar con paños que envuelvan el pecho de la madre. Puede ser una buena forma de acercar al niño a la luz de la ventana.
9. Utilizar técnicas de la fotografía de retrato
Hacer fotos de bebés sigue perteneciendo al arte del retrato. Esto significa que la mayoría de las técnicas de iluminación, los ángulos, los ajustes de la cámara el día de la toma y el trabajo de color en la edición son muy similares.
El objetivo de la fotografía de recién nacidos es captar el delicado estado del bebé y su naturaleza intrincada y frágil. Y utilizar técnicas de retrato en el proceso ayudará mucho a conseguirlo.
Explorar la fotografía de retrato
Empezando por los modelos más jóvenes, puedes progresar haciendo grandes retratos de todo tipo de edades.
Para obtener más consejos y trucos prácticos, visita nuestra Guía de fotografía de retratos. Te ayudará a iniciarte en la fotografía de recién nacidos y a desarrollar un conjunto de habilidades más completo.
PREGUNTAS FRECUENTES
¿Cómo hacer fotografía de recién nacidos?
En los retratos de recién nacidos, intenta planificarlo todo para evitar las molestias mientras el bebé duerme. Prioriza siempre la seguridad y la comodidad del modelo. Intenta utilizar luz natural y algunos accesorios únicos.
¿Cuánto cuesta la fotografía de recién nacidos?
Una sesión profesional de fotografía de recién nacidos suele costar entre 500 y 1.000 dólares, dependiendo de la experiencia del fotógrafo.
¿Cómo envolver a un recién nacido para fotografiarlo?
Hay varios estilos de envolver a un recién nacido: en capas, en un capullo, sobre el pecho de la madre o simplemente tumbado en la manta.