Transversal
¿De qué se trata?
El corte transversal es una técnica que se realiza durante el montaje, también conocida como montaje paralelo. Se aplica para manipular el tiempo y el espacio. En otras palabras, es una acción que ocurre simultáneamente en diferentes espacios. La mayoría de las veces, esos espacios se encuentran en el mismo lugar. La cámara pasa de una acción a la siguiente, estableciendo la línea temporal y el lugar de la actividad.
Por ejemplo, piensa en una escena de lucha. Dos personajes luchan contra un villano. La cámara pasa de una pelea a otra. Eso indica que las batallas son simultáneas pero en lugares diferentes. Hay muchos ejemplos de esta técnica en las películas de Hollywood. Para verla en acción, fíjate en el trabajo de Christopher Nolan en El prestigio, El caballero oscuro y otras.
Para utilizar los cortes transversales, se necesita un marco bien pensado de todas las líneas argumentales para que funcionen. Si se hace mal, se corre el riesgo de confundir al público. Con esto en mente, cuenta con un segundo par de ojos para criticar. Recuerda que lo que tiene sentido para ti no lo tiene automáticamente para el público.
Algunas cosas a tener en cuenta cuando se utilizan cortes transversales:
- Filma el material adecuado para facilitar el proceso.
- ¿Qué punto de vista representa la cámara?
- Consigue planos de establecimiento para mostrar el lugar.
- Separa las escenas con iluminación diferente.
- Consigue varios ángulos. Facilita el proceso.
¿Por qué utilizarlo?
Los cortes transversales son una técnica fantástica para contar historias complejas, como en Inception.
Los cortes transversales pueden tener muchas ventajas. Añade intensidad y suspense. Piensa en esta escena de El silencio de los corderos. El FBI irrumpe en la propiedad mientras Buffalo Bill cae en picado. Al final, asaltan la casa equivocada y, hábilmente, el público se equivoca.
Esa tensión y despiste es una forma brillante de utilizar los cortes transversales. Además, las llamadas telefónicas y las videollamadas son geniales con los cortes transversales. Manipular el tiempo y el espacio puede ayudar a transmitir la narración. La utilización correcta de los cortes transversales puede llevar al público al borde de su asiento.