Toma de grúa

¿Recuerdas el final de una película, en el que la cámara se aleja con la familia feliz delante de su casa? Mientras el narrador dice "Y vivieron felices para siempre". Pues lo más probable es que fuera un plano con grúa.

Las tomas con grúa se realizan desde una grúa móvil o un pescante. La controla manualmente un operador desde lo alto de la grúa o por control remoto. La toma con grúa es un trabajo de dos personas: una maneja la cámara y la otra la grúa.

Tiro de grúa frente a tiro de foque

Otra herramienta útil para esta toma es un plumín en lugar de una grúa. Un plumín es un poste de extensión unido a un trípode y puede lograr la misma tarea, dependiendo de la altura a la que quieras llegar. Los términos plumín y grúa se utilizan indistintamente y tienen la misma finalidad. Un plumín puede llegar muy bajo manteniendo la estabilidad de la toma, lo que resulta difícil para un operador de cámara en mano. Utilizar un plumín en lugar de una grúa es más barato y compacto, pero no alcanza las alturas que puede alcanzar una grúa. El uso de un plumín se conoce también como toma con pluma. Aquí puedes ver consejos y técnicas.

¿Por qué utilizar tomas con grúa?

La ventaja de utilizar una grúa o un plumín es que permite mover la cámara en todas direcciones desde varias alturas. No se necesita formación especializada para manejar ninguna de las dos. Dar al público un punto de vista elevado tiene un efecto cinematográfico importante. Una sensación de omnipresencia sobre un personaje cuando ves algo que él no ve. Se utiliza en escenas de suspense y para transmitir emociones y sensación de grandeza. Las tomas de paisajes o multitudes son increíbles con un plano grúa. Los planos con grúa son muy habituales al principio y al final de las películas.

Más información sobre plumas y grúas aquí.

Además, los planos con grúa se remontan a la época del cine mudo y han resistido el paso del tiempo.